La Organización Internacional de Comisiones de Valores (IOSCO, por sus siglas en inglés), ha publicado la Perspectiva de Riesgos en los Mercados de Valores 2016. Las malas prácticas en la venta de productos y servicios financieros ofrecidos a minoristas, los bonos corporativos en el mercado secundario, la cultura financiera y la amenaza cibernética centran las preocupaciones de la institución.
En esta edición, la perspectiva de riesgos va más allá del sistema financiero global. Dos objetivos que han establecido como prioritarios han sido la protección de los inversores y la eficiencia del mercado. Para ello, la institución ha destacado que es necesario un trabajo preventivo para identificar los riesgos en los mercados de valores, que, a su juicio, “juegan un rol muy importante en la financiación de la economía global”.
En cuanto a la mala conducta en la oferta de productos y servicios a clientes minoristas, IOSCO incide en que ésta puede aparecer de diversas formas. Una de las más populares es la venta engañosa. Los productos ofertados son “inherentemente complejos y muchos inversores no tienen la capacidad suficiente para entenderlos”, sostiene el informe. También añade que las altas comisiones en estas ventas puede conducir a que estos productos sean rechazados, en perjuicio de otra clase de inversores.
IOSCO también se ha referido a la cultura financiera de las entidades. Califica esta cuestión como “problemática”, alegando que, a pesar de que los reguladores identifican la mala conducta, no es algo que esté prohibido expresamente. Basta recordar que Holanda es uno de los pocos países que ha actuado en este campo, estableciendo un juramento hipocrático para los profesionales del sector, que en caso de no actuar en defensa de los intereses de los clientes, pueden ser despedidos.
La amenaza cibernética ha aumentado con frecuencia y de forma sofisticada en estos años, por lo que se está convirtiendo en un riesgo sistémico. Los reguladores de los mercados deben centrarse en mitigar los riesgos cibernéticos reforzando la seguridad, aconsejan. Los bonos corporativos suponen otra de las amenazas que contempla la institución, al alertar de que existe una preocupación de que el mercado secundario no sea capaz de asumir el incremento de la demanda de estos bonos.
En la construcción del informe han participado, además de IOSCO, el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Consejo de Estabilidad Financiera (FSB).
Referencias
Informe. Perspectiva de Riesgos de los Mercados de Valores 2016