El último informe de estabilidad financiera del Banco Central Europeo ve probable un incremento brusco de las primas de riesgo a escala global. Esto vendría propiciado por la inquietud generada por las economías emergentes, según ha hecho público en una nota de prensa.
El BCE ha señalado, además, otros tres riesgos para la estabilidad del sistema financiero en los próximos dos años, que se suman a esta posible subida de las primas de riesgo. Unas débiles perspectivas de rentabilidad para las entidades de crédito y las empresas de seguros en un contexto de bajo crecimiento nominal y de saneamiento incompleto de sus balances. Un riesgo potencial de que aumente la preocupación en torno a la sostenibilidad de la deuda de los emisores soberanos y del sector empresarial. Y por último, un incremento del riesgo de tensiones ante la rapidez del crecimiento de la banca en la sombra (shadow banking) que está creciendo con rapidez a escala mundial, amplificado por los efectos de contagio y el riesgo de liquidez.
Este informe, que se publica dos veces al año, sostiene por otro lado que el sistema financiero de la zona euro ha mostrado resistencia en los episodios de volatilidad del segundo semestre del 2015. Las turbulencias en Grecia y una corrección sustancial de los precios de los activos en China no alteraron los indicadores de tensión sistémica, que se mantuvieron en niveles contenidos.
También destaca el informe que la absorción de perturbaciones del sistema bancario de la zona euro observada en el primer semestre del año ha mejorado, al igual que la rentabilidad y los niveles de solvencia de las entidades de crédito. Aunque sostiene que todavía quedan tres retos importantes que deben afrontar estas entidades: la recuperación macroeconómica débil, la rentabilidad reducida y un alto volumen de préstamos morosos. Estos factores siguen limitando la capacidad de concesión de crédito y de reforzamiento de los colchones de capital de los bancos, sentencia el informe.
Referencias