The run on the Rock: Informe del Comité del Tesoro del Parlamento inglés sobre la crisis del banco Northern Rock
Fernando Zunzunegui
Con sentido del humor, el Comité del Tesoro del Parlamento inglés, ha denominado al demoledor informe sobre la gestión de la crisis del banco Northern Rock, la corrida o fuga del rock. Dejando aparte las bromas, se trata de un informe muy bien documentado que revisa la actuación de las autoridades del Reino Unido en la gestión de esta crisis bancaria, recogiendo importantes recomendaciones para corregir las debilidades detectadas.
El informe no pone en cuestión la actual estructura tripartita de autoridades financieras existente en el Reino Unido, que reparte las competencias entre el Tesoro, el Banco de Inglaterra y la Autoridad de Servicios Financieros (FSA), lo cual no es óbice para que realice una feroz crítica sobre la falta de coordinación entre las citadas autoridades y destaque con claridad los errores cometidos en la detección y gestión de la crisis del Northern Rock.
La que peor parada sale es la FSA. El informe considera que es culpable de un fallo generalizado en el ejercicio de sus deberes y de no haber visto el riesgo sistémico que el caso planteaba. Tampoco supo detectar el temerario plan de negocio del Northern Rock.
El Informe refuerza la posición del Banco de Inglaterra a través de la creación de un nuevo puesto en su organigrama. Recomienda crear un nuevo puesto de subgobernador del Banco de Inglaterra, encargado de la estabilidad financiera, con poderes adicionales a los previstos en el vigente marco legal para adoptar medidas preventivas que se anticipen a las crisis, que pueden llegar a la intervención de bancos, y liderar la gestión de las crisis, incluidos los acuerdos de saneamiento con participación de terceras entidades.
De la nueva figura se cuida especialmente la necesaria coordinación que deberá existir entre el Gobernador del Banco de Inglaterra, autoridad monetaria, y el nuevo subgobernador, autoridad de las crisis bancarias.
La FSA seguiría siendo la autoridad de supervisión bancaria, aunque el nuevo subgobernador tendría su propio cuerpo de inspectores, especializados en la detección de las crisis.
Se sigue de cerca la experiencia de la estadounidense Federal Deposit Insurance Corporation (FDIC), aunque no se ha querido crear una autoridad independiente para las crisis bancarias. Se ha preferido radicar dichas funciones en el Banco de Inglaterra, pero proponiendo la creación de un nuevo súper-gobernador, especializado en la prevención del riesgo sistémico y la gestión de las crisis bancarias.
El informe propone también una reforma en profundidad de la garantía de depósitos. Pasaría a crearse un nuevo fondo, con financiación ex-ante y bajo la autoridad del subgobernador encargado de la estabilidad financiera.
Un suma se tra de un buen informe y de unas buenas recomendaciones, aunque subsiste el problema de la coordinación entre diversas autoridades, lo cual obligará a buscar con lupa a los profesionales que deban ocupar puestos tan sensibles.
Referencia
Acceda al texto completo del Informe: House of Commons, Treasury Committee, The run on the Rock, sábado 26 de enero de 2008.