Vía El Boletín
Los afectados por las preferentes, a examen médico. Por primera vez, un grupo de científicos internacionales estudiará el efecto de la pérdida de ahorros por malas prácticas bancarias sobre la salud de quienes las sufren. Ese es el objetivo con el que este lunes ha nacido la Fundación FinSalud.
Los fines de esta nueva institución son “mejorar la salud física y mental de las personas que se encuentran en riesgo de exclusión social por haber sufrido pérdidas financieras súbitas”. Sus promotores son afectados “por los abusos bancarios”, especialmente por participaciones preferentes comercializadas indebidamente, que denuncian que esta mala práctica “ha afectado la vida y la salud de cientos de miles de ahorradores”.
Para poder concienciar a la sociedad y al conjunto de administraciones públicas del impacto de estas situaciones, FinSalud se ha embarcado en un estudio científico para medir el efecto que ha tenido sobre la salud de los afectados por “el expolio de ahorros” sufrido en muchos casos por “personas mayores o cerca de la edad de jubilación que deseaban una seguridad económica en su vejez”.
El portavoz de esta nueva fundación, Roberto Serrano, ha confirmado que en un primer momento se llevará a cabo entre miembros de plataformas de afectados y colectivos afines. Sin embargo, el objetivo es conseguir que las entidades financieras denunciadas faciliten datos de sus clientes para poder ampliar la base de muestra y conseguir que el estudio pueda contar con autoridad suficiente como para publicarse en revistas científicas de referencia, pues desde Finsalud se asegura que nunca antes se ha llevado a cabo un estudio en esta línea.
La institución ha nacido hoy en Madrid con miras a convertirse en “un referente al que poder acudir en busca de información útil y relevante que pueda ayudar a sobrellevar del mejor modo posible los efectos” de la pérdida de ahorros, según recoge la nota oficial de su constitución. Es así que el foco se pone en “concienciar a las instituciones de las consecuencias no sólo económicas, sino también personales, que estas situaciones producen en la población” las malas prácticas bancarias.
El patronato de la fundación, presidido por José Manuel Ribera Casado, catedrático emérito de Geriatría y académico de la Real Academia Nacional de Medicina, está formado también por Diego Gracia, especialista en Bioética, catedrático emérito de Historia de la Medicina y académico de la Real Academia Nacional de Medicina; Vicente Ortún, experto en Economía de la Salud y decano de la Universidad Pompeu Fabra; Roberto Serrano Lluch, presidente de la asociación de afectados AdaBankia, licenciado en CCEE y Empresariales y Máster en Administración Sanitaria y Fernando Zunzunegui, profesor de Derecho del Mercado Financiero y abogado en Zunzunegui Abogados, benefactor de la fundación.
A su vez, el comité científico de la Fundación lo forman Ángel Otero, director del Departamento de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM); María Victoria Zunzunegui, profesora de Medicina Social y Preventiva en la Universidad de Montreal; François Béland, profesor adjunto de la división de Geriatría de la Facultad de Medicina de la Universidad McGill; y Milena Gobbo Montoya, licenciada en Psicología en la UAM y miembro del Standing Committee of the Allied Health Professionals in Europe.
Con el objetivo de conseguir la máxima transparencia y fiabilidad del estudio, el presidente José Manuel Ribera anima “a los afectados a que contacten con FinSalud para que colaboren en el estudio de investigación aportando su experiencia”. En este sentido se investigará también sobre formas de reparación y tratamiento tanto para perjuicios físicos como psicológicos.