Extracto de la entrevista de Javier del Pino a Fernando Zunzunegui  ‘A vivir que son dos días’, de la CadenaSer, con Patricia Suárez, coordinada por Simona Levi.

CadenaSer opt 300x225 Zunzunegui: “Banco de España debería obligar a la banca a devolver lo cobrado por cláusulas suelo abusivasCasos como el de las preferentes de Bankia o las cláusulas suelo son el mejor ejemplo de lo complicado que resulta plantar cara a los bancos. ¿Cómo luchar conjuntamente contra los fraudes financieros o corporativos? La opción más lógica y a priori efectiva es la agrupación de consumidores, pero agruparse, al contrario de lo que pueda parecer, no resulta nada fácil en España… ¿Por qué? ¿Está preparada nuestra legislación para proteger a los consumidores e indemnizar a los afectados? Analizamos estas cuestiones con Fernando Zunzunegui, abogado y profesor de Derecho del Mercado Financiero en la Universidad Carlos III de Madrid.

¿Por qué la legislación española pone tantas trabas a las demandas colectivas?

La legislación permite las demandas colectivas y que los abogados acumulen acciones en un único procedimiento. Pero tienen bastantes cautelas. Hay una separación de lo que es el sistema de class action, de acciones colectivas estadounidenses, o de las indemnizaciones millonarias que hemos visto en las películas. Aquí se tiene más cautela, no solo en España, sino en toda Europa, y la Comisión Europea así lo ha expresado: no se quiere abrir la posibilidad a lo que son daños punitivos, es decir, que una persona, por ejemplo, reciba 500 millones euros porque en una hamburguesería se le ha caído un café caliente. Ese tipo de situaciones en Europa no se dan y tampoco en España. Pero que no podamos compararnos con Estados Unidos y que existan despachos muy potentes de demandas colectivas, no significa que no exista la vía, la vía existe en la ley.

La vía existe pero es una vía muy estrecha, porque un individuo no puede iniciar esa demanda colectiva y tiene que ser una asociación.

Las demandas colectivas son las asociaciones de consumidores quienes pueden presentarlas. Pero hay una letra pequeña que dificulta en gran medida que se admitan a trámite y luego todo el procedimiento. De tal modo que, en la práctica, muy pocas acciones colectivas llegan a tener resultados. Luego resulta relevante cómo se está aplicando la ley. ¿Quién tiene la culpa de todo esto? ¿Por qué no dan resultados? De algún modo nos faltan en España asociaciones de consumidores técnicas con grupos de abogados, de expertos, que examinen las cuestiones y que preparen con todo detenimiento los casos, estableciendo los daños, la causalidad… Hay un trabajo previo muy intenso que exige muchísimo trabajo y que las asociaciones o no pueden o descuidan. Esto da pie a que los jueces vayan con prudencia y celo profesional no admitiendo a trámite, o que no tengan el resultado esperado.

Y luego hay un tema no menor, ¿quién recibe las demandas colectivas que pueden llegar a tener cien mil folios? Las recibe una persona, un juez que ve cómo sobre su mesa y en los pasillos aparece un procedimiento de decenas de miles de folios, y de algún modo, dice, ¿qué hago? Una posibilidad es no admitir a trámite el procedimiento, probablemente hay una justificación, y es que no tenga la técnica adecuada. Pero el hecho es que la autoridad de los jueces, el Consejo General del Poder Judicial, podría perfectamente liberar de trabajo al juez que recibe una demanda de este tipo y, por ejemplo, dejarle que en seis meses o en un año se dedique únicamente a tramitar algo tan importante como son las cláusulas suelo de cien mil personas.

Nos hemos reunido con el CGPJ, acompañados por Patricia Suárez, la presidenta de ASUFIN, y Roberto Serrano de Adabankia, pero desatendieron totalmente estas peticiones, de que en la carga de trabajo de los jueces se tenga en cuenta, que si admiten una demanda colectiva quedan liberados de los demás trabajos y se van a dedicar a resolverla de forma eficaz para que haya economía procesal, no haya sentencias contradictorias y de esta forma se pueda, en unos meses, resolver asuntos que acumulan miles de demandas.

¿Qué tiene que cambiar para que el sistema funcione?

Bueno, cuando hay casos de masa, que afectan a cientos de miles de personas, deben ser resueltos por las autoridades administrativas, si son financieros, por el Banco de España y la CNMV. Y obligar a que cuando un banco ha incluido una cláusula suelo sin negociación con el consumidor, una condición del contrato predispuesta por el banco que es abusiva porque así lo ha dicho el Tribunal Supremo español y el Tribunal europeo, cumpla la sentencia y con un mero formulario presentado ante el propio banco devuelva el dinero. Y ante aquellos bancos que no lo hagan, que los consumidores puedan reclamar al propio Banco de España y este les obligue a la devolución. Y si no lo hacen, que les abran expediente sancionador que puede llegar a la retirada de la licencia para operar en el mercado; así se devuelve la disciplina al mercado y se recobra la confianza de los afectados aparte de recobrar el dinero.

Al principio hacíamos referencia a la legislación estadounidense, donde siempre tienes derecho a formar parte de una demanda colectiva y no tienes que hacer prácticamente nada como consumidor para que te devuelvan lo que has pagado de más. ¿A cuántos años luz estamos de un sistema que funciona de esa manera?

Ese sistema, incluso en Estados Unidos, se han puesto límites a las cantidades que se pueden recobrar porque todos quedan forzosamente incluidos en la demanda y estas son manejadas por grandes despachos de abogados que tienen unos porcentajes del 30% y reciben centenares de millones en caso de éxito. Luego repercute en todos, pero además puede llevar incluso a la quiebra de compañías.

Es una cuestión que va más allá, decidir si es mejor que todos recuperen su dinero menos un 30% o que solo unos pocos recuperen todo su dinero.

Hay que articular un sistema donde aquellos que reclamen reciban la compensación y no necesariamente a través del sistema de Estados Unidos, que puede llegar a ser algo desproporcionado, incluso dar lugar a demandas abusivas.

¿Qué pasa entonces con aquellos que no han reclamado porque no saben que están siendo estafados, por un banco por ejemplo?

Como decimos, hay agencias, autoridades administrativas, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia en general, para finanzas el Banco de España y la CNMV, que son las autoridades del mercado financiero. Y cuando hay una práctica generalizada en masa que ha detraído dinero, sisado en el tema de las cláusulas suelo, que hay un fraude, es decir, que se ha detraído dinero de la gente de forma abusiva, pueden ser mil o tres mil euros, pero pueden ser también diez o doce euros, esas autoridades deben obligar a las empresas a gestionar la devolución y deben facilitarlo a través de un simple formulario, y estas reclamaciones deben ser gratuitas y para todo el mundo. Esta es la vía.

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